Grandes Mangas XIV: Claymore (2001)

No tengo mucha idea sobre mangas con protagonistas femeninas porque, la verdad, nunca me he sentido atraído por ninguno. InuYasha es una excepción, pero hay que tener en cuenta que tiene un coprotagonista masculino que siempre está presente.

Esta "ignorancia" por mi parte me impedía fijarme en muchos manga (aunque creo que en el género que yo leo, el shonen, no abundan historias con protas femeninas) y seguramente haya provocado que me pierda grandes historias, pero no fue así con Claymore, que siempre me había resultado llamativo por su dibujo y lo poco que sabía de la trama (lecturas ocasionales a las contraportadas cuando iba a la tienda) hasta que empecé a comprar sus tomos y resultó tener un estilo casi idéntico a lo que suelo buscar en este medio.

Las Claymore son una hermandad de mujeres guerreras que reciben su nombre debido a las enormes espadas que empuñan, las cuales nadie más es capaz de utilizar al mismo nivel que ellas debido a su difícil manejo. La única ocupación y objetivo en la vida de estas mujeres es exterminar a los denominados espectros, una especie de demonios que se alimentan de seres humanos.
Son las únicas que pueden detectarlos gracias al secreto de su hermandad, una experimentación que tiene como resultado habilidades sobrehumanas y provoca unos rasgos comunes en todas ellas (ojos plateados y cabellos claros), y que les han hecho ganarse el temor de los mismos ciudadanos a los que protegen (aunque pedir siempre una enorme recompensa por sus acciones seguramente también influya).

La historia se centra, al menos en un principio, en Claire, una Claymore de bajo rango que ingresó en la hermandad en busca de venganza contra una mujer de su pasado. Ella y Raki, un joven acompañante que hace de nexo entre la protagonista y su humanidad, sirven de presentación a las motivaciones que forman la historia, la hermandad y los espectros, pero una vez establecidos estos conceptos, el manga muestra un estilo narrativo basado en flashbacks, aventuras de otras Claymore y explicaciones sobre el origen de algún personaje secundario.
Es algo realmente magistral y que me ha encandilado, ya que mantiene siempre el interés, muestra diferentes puntos de vista y hace que veas como protagonistas a casi todos los personajes que aparecen en el manga.

Esta forma de contar la historia tiene también sus inconvenientes, como hacer de este un manga que difícilmente puede leerse de forma ocasional cogiendo un tomo cualquiera de tu estantería (algo que yo hago mucho) ya que el argumento y las presentaciones de personajes están hiladas de formas muy distintas. 
La historia de Claymore está hecha para leer de seguido sus tomos e ir releyéndola desde el principio cuando nos apetezca repetir y entretenernos, un papel que cumple a la perfección.

Me ha quedado claro que tengo que informarme más, fijarme en cualquier manga que parezca llamarme un poco la atención y no quedarme encerrado en unas preferencias demasiado concretas.
Estas mujeres guerreras se han convertido rápidamente en unos personajes muy queridos y la historia que protagonizan está entre mis preferidas. Entretenida, cargada de momentos épicos y sabiendo aprovechar muy bien su propio potencial, Claymore me parece un manga excelente.