Otra saga más basada en el universo del juego de rol Warhammer, otra nueva tirada de novelas sorprendentemente bien escritas y con una calidad excelente, pero esta vez es algo muchísimo mejor si cabe, esta vez es el Santo Grial de las novelas de aventuras.
Había oído hablar de ellos, ya que son mencionados brevemente en muchos otros libros del universo, y no ignoraba el hecho de que tenían su propia saga, pero no ha sido hasta que me he puesto a leer Las Aventuras de Gotrek y Félix que he descubierto realmente hasta que punto pueden estos dos personajes ser literalmente adictivos.
Doce son los libros protagonizados por esta inusual pareja de aventureros, y aunque solo voy por la mitad ya estoy totalmente seguro que en lo que al género de aventuras se refiere serán muy difíciles de superar.
Llevaba ya muchos libros atrás sin pasarme días enteros pegado a las páginas (del libro electrónico) ignorando completamente incluso el paso de las horas.
Félix Jaeger es un joven poeta y estudiante de la Universidad de Altdorf (capital del Imperio humano) con un prometedor futuro como comerciante en la empresa de su acaudalado padre hasta que un día, por un desafortunado error, asesina a un compañero con quien estaba manteniendo un duelo de espadas.
En ese momento Félix es expulsado para siempre de la Universidad y desheredado por el agravio cometido a su familia, lo que le lleva a convertirse en una especie de paria que acaba envuelto en los disturbios ocasionados entre la población por el Impuesto Sobre Ventanas (una ley absurda que cobraba sumas de dinero por cada ventana de cada casa).
Justo cuando la caballería imperial se disponía a acabar con su vida, Félix es rescatado por un grotesco enano que recibe el nombre de Gotrek Gurnisson.
Esa noche, Gotrek le cuenta a Félix su historia (o parte de ella). Miembro de la Antigua Raza de los enanos, Gotrek cometió hace muchos años algún tipo de crimen o agravio tan grave como para renegar de su clan y convertirse en un Matador, una especie de secta guerrera cuyo único objetivo es hallar la muerte de la manera más gloriosa posible.
Completamente borracho, Félix le jura a Gotrek que le acompañará en sus viajes y se encargará de plasmar su muerte en un poema épico.
A lo largo de un viaje sin ningún objetivo claro aparte de buscar las mayores amenazas potenciales del mundo, Gotrek y Félix llegarán a vivir aventuras que serán la envidia de todo héroe de fantasía épica.
Se adentrarán en ciudades pérdidas, cuevas plagadas de trampas mortales y otros lugares que ningún otro mortal habría osado pisar, en los que tendrán que enfrentarse a todo tipo de seres sacados del Universo Warhammer y los clásicos del género como dragones, vampiros o demonios.
Algunas de estas aventuras se llegan a hilar con otras, habiendo ciertos personajes o lugares en común, pero en general sorprende que haya semejante calidad en una saga que tiene como base un estilo de "relatos varios".
Las acciones de la pareja casi siempre tendrán una gran relevancia para el resto del mundo, aunque llevarlas a cabo en lugares recónditos y el ser considerados criminales en la mayoría de las ciudades civilizadas les impedirán ser todo lo famosos que deberían.
Ese es otro aspecto bastante logrado y bien justificado de las novelas, pese a los peligros a los que Gotrek y Félix sobreviven y las incontables vidas que salvan (queriendo o no) nunca son reconocidos como poco más que vagabundos en el mejor de los casos.
Como no podría ser de otra manera, a lo largo de Las Aventuras de Gotrek y Félix aparecen una gran cantidad de personajes, pero solo la pareja principal se mantendrá durante los doce libros y cargarán con el peso principal del argumento.
Las abismales diferencias que hay entre ambos es probablemente una de las grandes virtudes de estos libros, ya que ver todo tipo de situaciones desde el punto de vista de dos personas tan opuestas es muy entretenido.
Félix es un joven alto de cabellos rubios, apuesto y atractivo si no vistiese como un vagabundo mientras que Gotrek es un enano grotesco con una cresta de llamativo naranja, más ancho que un toro y con el cuerpo lleno de tatuajes.
El humano es sensato, inteligente y algo temeroso en un principio, con bastante conocimiento en las artes de la educación y el protocolo. El enano es un tipo demente, grosero y capaz de partir en dos a cualquiera con su hacha rúnica si así puede obtener una buena pelea.
Uno carga con un juramento del que se arrepiente y saber que no tiene sitio en el mundo, el otro con un pasado terrible (hasta donde yo he llegado no se desvela, pero se dan unas pistas terribles) y un único objetivo: morir.
Son muchas las cosas que me han enamorado de esta serie de libros, pero si tendría que destacar una en concreto escogería la evolución que Félix sufre a lo largo de sus aventuras.
No es más que un joven al que el destino ha tratado terriblemente mal y que se ve envuelto en una aventura para narrar un poema sobre la muerte de un enano demente a sabiendas de que, irónicamente, cualquier cosa capaz de acabar con Gotrek supondría también su propia muerte.
Ver la muerte de cerca, enfrentarse a seres que ni sus más horribles pesadillas habrían logrado crear y comprobar en primera persona que los seres humanos no son precisamente un ejemplo de virtud irán cambiando a Félix física y psicológicamente.
Lo más divertido es que estaremos tan metidos en la historia que cuando nos percatemos de los cambios sufridos en el joven poeta nos quedaremos muy sorprendidos.
Las Aventuras de Gotrek y Félix es una colección de novelas excelente con mayúsculas. Narra algunos de los viajes y batallas más épicos que he leído nunca y los dos protagonistas son algo soberbio.
A cualquiera que le guste la fantasía, las grandes y épicas batallas y las historias de monstruos tiene aquí una lectura obligatoria.
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