sábado, 1 de junio de 2013

Un modelo a seguir: Dragon Age Origins


Soy un gran fan de los videojuegos, siendo capaz de disfrutar de casi cualquier género siempre y cuando el juego se ajuste a mis preferencias, no importa si es un Arcade, un Shooter o un Hack and Slash.
Pero si hay un género que me gusta especialmente, cuyas mejores obras ocupan la mayor parte de mi estantería, ese es el RPG o Rol.
La que considero la condición básica para calificar un juego como RPG (Role Playing Game) es que al jugar tomes el papel de un personaje, muchas veces "anónimo" en el mundo en que se desarrolla ese videojuego, y vayas desarrollándolo de la forma que tu quieras conforme avanzas.

Pero lo que verdaderamente hace de un RPG un gran juego es su historia, su mundo.
Un buen juego de rol te mete de lleno en un mundo con el que se podría escribir un libro (y en el caso de muchos de mis videojuegos preferidos así ha sucedido) o que directamente esta basado en uno.
Esto implica que cuando juegues pasaras a formar parte de un mundo único, con sus propios mitos y leyendas, sus diferentes culturas y, en los más fantásticos, sus variadas razas de seres inteligentes.
Un RPG de verdad es aquel que te permite no ya "jugar un libro", sino ser una parte importante de el, y escribir los capítulos mas importantes.